Estoy exactamente a 65 días de casarme. Tengo 26 años. Pareciera que esa combinación de oraciones no se lleva en estos tiempos. “Casarse a esa edad es un desperdicio de vida”, “vas a arruinar tu vida”, “apenas estás comenzando a vivir”, es lo que ahora el mundo te vende.
A lo largo de mi vida, que no es tan larga, he observado que existen varios motivos por los cuales las personas no se quieren casar actualmente. Por ejemplo: falta de dinero, piensa que allí terminará su vida “cool” o su “libertad”, aunque la más utilizada aun sin decirlo es el miedo al compromiso. Hablábamos con varios de mis amigos contemporáneos y ellos me felicitaban por mi compromiso con mi novia, sin embargo, al momento de preguntarles cuando lo harían su respuesta era: “aún no estoy listo”.
Les tengo una noticia, si alguien en este momento me preguntase si estoy listo para casarme adivinen qué le contestaría… Exacto NO LO ESTOY. Se han de preguntar ¿pero si estas a tan solo días de casarte y me dices que no estas listo? Sí, no lo estoy. Jamás se está listo para casarse. Es una de las decisiones más importantes en la vida de cualquier ser humano. Sin embargo, uno no estará listo para hacerlo. Es por ello por lo que quiero contarles lo que a mi me tranquilizó después de haber llegado hasta pensar que me había adelantado al tiempo de Dios.
Aunque muchas personas inician su matrimonio con mucho dinero, también he notado que otras parejas se inician con lo necesario, hasta ajustados a un presupuesto. Pero la felicidad de ambos casos es exactamente la misma. Quien no pudiera ser feliz cuando tienes la oportunidad de vivir a lado de la persona que más amas en este planeta, descubrir cosas de tu pareja que no conocías, comenzar aventuras y viajar juntos, en fin podría hacer una lista infinita del porque el matrimonio es una de las mejores cosas para el ser humano.
Allí me di cuenta de que no importa si puedes vivir en el mejor vecindario del mundo o en una casa pequeña, pero si lo haces con la persona correcta y con Dios, te aseguro que serás feliz. Por último, quiero dejarte con este versículo que lo hemos leído y escuchado muchas veces. Proverbios 18:22 “El hombre que halla esposa encuentra un tesoro, y recibe el favor del Señor”.
Por: Marito Torres.